En Barcelona hay bares que forman parte del paisaje emocional de la ciudad. Bares donde el tiempo pasa más despacio, donde el café humea en la barra, donde las conversaciones cruzan la sala sin prisas. Bar Bauma es uno de esos lugares: un bar catalán de toda la vida, con alma de barrio, que ha sabido conservar su esencia mientras incorpora ideas que sorprenden a quien se sienta por primera vez.

Entre esas ideas, una de las más celebradas es el brioche del mes: una creación única, diferente cada mes, que mezcla tradición, producto de temporada y ese toque de creatividad que hace que Bauma sea Bauma. Cada brioche es un guiño a la cocina catalana, reinterpretado con cariño y sin perder la sencillez que caracteriza a los bares auténticos.

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Octubre: “Sabores de casa”, un brioche que habla el idioma del otoño

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El otoño llegó a Bauma con un brioche que sabía a madres, a abuelas, a excursiones por la montaña y domingos de cocina lenta. El brioche de octubre podría bautizarse como “Sabores de casa”, y es que no podía haber un nombre más acertado.

Un pan tierno y mantecoso que abrazaba una butifarra de perol, ese embutido tan nuestro, tan de pueblo, acompañada de setas de temporada, hechas al punto, con ese aroma a bosque húmedo que marca el inicio del frío. La mayonesa de ceps redondeaba el conjunto con una profundidad deliciosa, de esas que te hacen cerrar los ojos un segundo más de lo necesario.

Era un brioche que no necesitaba presentaciones. Bastaba morderlo para sentirse en casa.

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Noviembre: ropa vieja, castañas y crujiente de cerdo

Noviembre llegó con un brioche que reivindicaba la cocina de aprovechamiento, la de toda la vida, la que en Cataluña siempre ha sabido convertir las sobras en tesoros.

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El brioche de ropa vieja fue un golpe directo a la nostalgia: carne tierna y deshecha, cocinada con paciencia, mezclada con una mayonesa de castañas que recordaba a chimenea, a bosque, a calles mojadas al atardecer. Para rematar, un crujiente de cerdo que hacía de cada bocado una mezcla perfecta entre tradición, gula y carisma.

Un brioche potente, goloso, muy Bauma: un clásico modernizado sin perder ni una pizca de su alma original.

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Diciembre: el siguiente capítulo está a punto de llegar

Y ahora, diciembre.
El mes de las luces, del frío que pide platos calientes, de los paseos por Barcelona con bufanda y manos en los bolsillos. El mes en que todo el mundo pregunta:

“¿Y cuál será el brioche de este mes?”

En Bauma, la respuesta siempre llega con sorpresa. Sabemos que será un brioche de temporada, con ingredientes que hablen del invierno, tal vez con algún guiño a la Navidad, quizá con un toque de brasa o siempre con producto local… pero lo que sí sabemos es que llegará con personalidad.

Y llegará con esa mezcla tan Bauma: lo clásico y lo nuevo sentados en la misma mesa.

Si quieres descubrirlo antes que nadie, solo tienes que seguir a Bar Bauma en Instagram, donde cada mes se presenta el brioche como se merece: con vídeo, con sabor y con ganas de que lo pruebes.

Los brioches del mes no son una moda ni un capricho gastronómico. Son una manera de mantener viva la esencia de un bar de barrio, de esos donde se mezcla gente de toda la vida con visitantes que lo descubren por primera vez. Cada brioche es un puente entre la tradición catalana y la creatividad actual, entre el pan tierno y los sabores de siempre, entre el Bauma que fue y el Bauma que es.

Si aún no los conoces, este es el mejor momento para empezar.
Si ya los sigues, sabes que no falla.